Nos ha propuesto para el lunes y el martes venir al colegio con corbatas, lazos, sombreros o pelucas.
Hemos acatado sus órdenes estrictamente para ir acostumbrándonos al carnaval y perder poco a poco el miedo al ridículo.
Narciso ha disfrutado de un cumpleaños muy carnavalero. Ha soplado las velas rodeado de compañeros y compañeras un poco distintos.
Y los alumnos/as de infantil de cinco años se han ido tan contentos, que solamente nos ha dado tiempo de hacer la foto a los últimos en ser recogidos.
Los alumnos/as del primer ciclo también han querido disfrazarse, y aunque para los profes las clases han sido más difíciles de impartir por lo molesto que resultan los gorros y las pelucas, nos lo hemos pasado bastante bien.
Las maestras de infantil también tenían que dar ejemplo
Y....¿a qué estos otros niños/as posan muy bien con sus sombreros?
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